Decenas de miembros de la comunidad surfista de Baja California se congregaron en la Plaza Cívica de Ensenada para expresar solidaridad y exigir mayor seguridad en las playas, tras la desaparición de dos australianos y un estadounidense durante un viaje de surf el pasado 27 de abril. El descubrimiento de tres cadáveres en Santo Tomás, cerca de donde se vio por última vez a los surfistas, ha generado una profunda preocupación y movilización.
La colaboración entre las autoridades mexicanas y el FBI ha intensificado la búsqueda de los desaparecidos, mientras que el hallazgo de un vehículo quemado en la zona agrega un nivel de inquietud adicional. La presencia de grupos del crimen organizado en la región complica aún más el panorama, recordando tragedias pasadas como el asesinato de dos surfistas australianos en Sinaloa en 2015.
La madre de los surfistas desaparecidos, Debra Robinson, ha compartido su angustia en las redes sociales, instando a un resultado positivo en la búsqueda de sus hijos. La solidaridad internacional se ha manifestado, con el primer ministro de Australia expresando su preocupación y la embajada australiana en México colaborando estrechamente con las autoridades locales.
Este trágico incidente resalta los desafíos de seguridad que enfrentan los turistas en áreas afectadas por la violencia criminal en México. A pesar de sus atractivas playas y ambiente cosmopolita, Baja California sigue siendo uno de los estados más violentos del país. La espiral de violencia que ha cobrado miles de vidas y dejado a muchas personas desaparecidas es un recordatorio sombrío de la urgencia de abordar los problemas de seguridad en la región.
La marcha de los surfistas en Ensenada es un llamado a la acción para garantizar la protección de quienes disfrutan de las playas de Baja California y para que las autoridades redoblen sus esfuerzos en la búsqueda y el esclarecimiento de la desaparición de los extranjeros. La solidaridad y la demanda de seguridad son pilares fundamentales para la preservación del turismo y la tranquilidad en la región.