Quiero compartirles la asesoría legal penal internacional que me hizo la inteligencia artificial cuando le expuse la problemática de la detención ilegal que sufrió el Mayo Zambada ya que fue presentado mediante secuestro y tortura a las autoridades americanas. Vale la pena que evaluemos esto, ya que nos puede marcar una pauta de qué tal vez la manera como fue presentado fue parte de una negociación de oportunidad que le presenta al Mayo una oportunidad jurídica.
Respuesta: 💻🖲️⚖️
Este es un tema complejo en el derecho internacional. Cuando un narcotraficante es secuestrado y llevado ilegalmente de un país a otro, como en tu ejemplo, la situación se vuelve delicada en términos legales.
Desde una perspectiva de derecho internacional, la detención ilegal de una persona en un país extranjero sin seguir los procedimientos de extradición puede considerarse una violación de la soberanía del país de donde fue llevado. Este tipo de acción se conoce como secuestro internacional y puede generar conflictos diplomáticos entre los países involucrados.
Sin embargo, en la práctica, si la persona es llevada a Estados Unidos y existe una orden de aprehensión válida, las cortes estadounidenses generalmente permitirán que el proceso penal continúe. Esto se debe a una doctrina conocida como la “doctrina de Ker-Frisbie”. Según esta doctrina, las cortes estadounidenses han sostenido que la manera en que un acusado es traído al país no afecta la jurisdicción para juzgarlo, siempre y cuando exista una orden válida.
Dicho esto, el acusado o su defensa podría argumentar la ilegalidad de su detención en un intento por evitar el juicio o obtener otros remedios legales. Sin embargo, en muchos casos, las cortes han rechazado estos argumentos, permitiendo que el proceso penal continúe.
En resumen, aunque la detención fue ilegal, es probable que el juicio en Estados Unidos proceda, pero el asunto podría ser objeto de litigio y debate en los tribunales.
Aunque la doctrina predominante en Estados Unidos es la Ker-Frisbie, que permite que un juicio proceda a pesar de la forma en que el acusado fue llevado al país, hay algunos casos que sugieren que la manera en que una persona es traída a Estados Unidos podría, en circunstancias excepcionales, influir en el resultado del caso.
El caso más relevante es el de Álvarez-Machain v. United States. En este caso, un médico mexicano fue secuestrado en México por agentes de la DEA con la ayuda de contratistas privados y llevado a Estados Unidos para enfrentar cargos relacionados con el asesinato de un agente de la DEA. La Suprema Corte de los Estados Unidos decidió en mil novecientos noventa y dos que el juicio podía proceder a pesar del secuestro ilegal, citando la doctrina de Ker-Frisbie. Sin embargo, la Corte también mencionó que el secuestro violaba el derecho internacional, lo que llevó a que el caso se convirtiera en un punto de debate sobre el uso de métodos ilegales para llevar a personas a Estados Unidos.
Aunque el resultado final en el caso de Álvarez-Machain fue que el juicio procedió, existen situaciones en las que la manera de traer al acusado podría influir en la decisión de las cortes. Por ejemplo:
- Violación de derechos humanos: Si el tratamiento de la persona durante el secuestro fue extremadamente violento o inhumano, podría haber un argumento para su liberación o para desestimar el caso.
- Acuerdos bilaterales o tratados internacionales: Si hay acuerdos específicos entre los países involucrados que fueron violados por la forma en que la persona fue llevada a Estados Unidos, esto podría llevar a una controversia legal.
- Consideraciones políticas y diplomáticas: Si el secuestro causa un conflicto diplomático significativo, esto podría influir en la decisión del gobierno de proceder con el juicio.
Sin embargo, hay que señalar que la posibilidad de que un tribunal estadounidense desestime el caso basándose únicamente en la ilegalidad de la detención es baja debido a la doctrina de Ker-Frisbie. La defensa tendría que presentar argumentos muy sólidos relacionados con violaciones de derechos humanos, tratados internacionales, o demostrar que el caso es tan excepcional que justifica una desviación de la doctrina habitual.
La doctrina Ker-Frisbie establece que, en Estados Unidos, los tribunales tienen la autoridad para juzgar a una persona, independientemente de cómo fue traída al país, siempre y cuando exista una orden de arresto válida. Esta doctrina proviene de dos casos clave:
- Ker v. Illinois (1886): En este caso, un acusado fue secuestrado en Perú y llevado a Estados Unidos. La Corte Suprema decidió que la forma en que el acusado fue traído al país no afectaba la jurisdicción del tribunal para juzgarlo.
- Frisbie v. Collins (1952): Aquí, un acusado fue secuestrado en otro estado y llevado ilegalmente a Michigan. La Corte Suprema reafirmó que la jurisdicción del tribunal no se ve afectada por la manera en que el acusado es capturado y traído al tribunal.
En resumen, la doctrina Ker-Frisbie sostiene que, mientras haya una orden de aprehensión válida, el juicio puede proceder, incluso si el acusado fue llevado a Estados Unidos de manera ilegal.
Aunque la doctrina Ker-Frisbie se ha aplicado consistentemente en la mayoría de los casos, ha habido situaciones excepcionales en las que las circunstancias de la captura han influido en el resultado del caso, aunque no tanto para desestimar completamente un caso penal. Sin embargo, no hay muchos precedentes donde la doctrina se haya rechazado por completo para invalidar la jurisdicción de un tribunal debido a un secuestro. A continuación, algunos matices y casos relevantes:
- United States v. Toscanino (1974): Este caso es uno de los pocos ejemplos donde la aplicación estricta de la doctrina Ker-Frisbie fue cuestionada. Toscanino fue secuestrado en Uruguay y sometido a torturas antes de ser llevado a Estados Unidos para enfrentar cargos. La Corte de Apelaciones del Segundo Circuito dictaminó que si se puede probar que hubo tortura y violaciones graves de derechos humanos, el tribunal podría perder jurisdicción sobre el acusado. Aunque la Corte no anuló de inmediato la jurisdicción, remandó el caso para más investigación sobre las circunstancias del secuestro.
- United States v. Verdugo-Urquidez (1990): Aunque este caso no trató directamente sobre la doctrina Ker-Frisbie, sí abordó los derechos de extranjeros capturados y llevados a juicio en Estados Unidos. La Corte Suprema confirmó que los derechos constitucionales, como la Cuarta Enmienda (que protege contra registros e incautaciones irrazonables), no se aplican de la misma manera a extranjeros fuera de Estados Unidos. Esto refuerza la idea de que el modo en que una persona es llevada al país no anula automáticamente el caso.
En general, aunque existen situaciones donde la brutalidad extrema o la violación de derechos humanos podría llevar a un tribunal a reconsiderar su jurisdicción, es muy raro que un caso sea desestimado por completo debido a la forma en que el acusado fue traído al país. Los tribunales suelen estar más dispuestos a dejar que el proceso penal continúe, incluso si hubo irregularidades en la captura, aunque en casos excepcionales se podría conceder algún tipo de recurso.